Breve historia del barrio
BELGRANO, PUEBLO CIUDAD CAPITAL Y BARRIO (1855-1888)
Desde el triunfo de la revolución del 11 de septiembre de 1852 Buenos Aires, era de hecho un Estado soberano. – No había aceptado la Constitución sancionada en Santa Fe el 1º de mayo de 1853, y no formaba parte de la Confederación Argentina cuyo presidente era Justo José de Urquiza desde 1854.-La provincia rebelde, como se la llamaba, se da su propia Constitución el 11 de abril de 1854 y enseguida la legislatura porteña eligió a Pastor Obligado como gobernador.
UN PEDIDO DE LOS VECINOS DE FLORES
Una veintena de vecinos del Partido de San José de Flores, hicieron el 19 de octubre de 1855 una presentación al ministro de Gobierno de la Provincia de Buenos Aires Valentín Alsina, manifestando que debido a que la población había crecido extraordinariamente en ese Partido se hacía necesaria su división. -Como la petición fue acogida favorablemente, el gobierno porteño resolvió el 23 de noviembre de 1855, con la firma del ministro Alsina fundar un pueblo en sobre los terrenos de la Calera. –
El 6 de diciembre se le dio nombre y se realizó su trazado delimitado por las actuales calles 11 de septiembre, La Pampa, Crámer y Monroe. -Así sin ceremonia alguna, sin acta de asentamiento quedó fundado el nuevo pueblo.
¿POR QUÉ SE LE DIO EL NOMBRE DE BELGRANO AL PUEBLO?
La noticia de la muerte del General Manuel Belgrano, ocurrida en Buenos Aires, el 20 de junio de 1820, casi no fue conocida por los porteños, perturbados y confundidos en el Día de los tres Gobernadores.
Un año después se rindieron diversos homenajes a la memoria del prócer. Consecuencia directa de estos homenajes fue la presentación hecha al gobierno, por un grupo de ciudadanos solicitando, que la próxima ciudad que se fundase al sur de la provincia lleve el nombre del General Manuel Belgrano como así también una de las calles de Buenos Aires. Si bien la colecta para sufragar los gastos de la fundación del pueblo en principio se llevó a cabo, el proyecto no se sabe porque no prosperó y quedo incumplido hasta 1855 en que el ministro de gobierno de la provincia de Buenos Aires Dr. Valentín Alsina aprueba el trazado del pueblo y declara que el mismo llevará el nombre del prócer.
LOS PRIMEROS TIEMPOS
Pasados apenas unos meses de la fundación del pueblo, el ingeniero Aurelio López de Bertodano inició la construcción de su casa, sita en la actual calle Ciudad de La Paz entre Sucre y Echeverría. El 3 de diciembre de 1856 el gobierno provincial dispuso erigir al pueblo de Belgrano en un partido judicial de campaña al que se le asignó una jurisdicción tan amplia como para que quedase incluida en él la casa de Juan Manuel de Rosas en Palermo. El día de la festividad de la Inmaculada Concepción se inauguraron las obras de restauración de la antigua capilla de la Calera, ubicada en lo alto de la barranca, a la altura de La Pampa y Arríbenos. Como no hubo ceremonia de fundación en 1855, la restauración de la capilla constituyó el primer acto público importante realizado en Belgrano. Valentín Alsina fue padrino de la ceremonia y el presbítero León Federico Aneiros bendijo las obras. Ese día el pueblo contó con la asistencia de invitados que llegaron en unos doscientos carruajes, con los sones de las bandas militares, el repique de campanas, el estruendo de bombas y con el ascenso por los aires de un globo celeste y blanco.
LA CASA MUNICIPAL
El gobierno provincial fijó el 24 de febrero de 1865 los límites del Partido d Belgrano, que hoy podríamos describir así: el río de la Plata; la avenida General Paz, la avenida de los Constituyentes hasta juntarse por detrás del cementerio de la Chacarita con la avenida Warnes; esta avenida hasta su intersección con Scalabrini Ortiz, y esta calle hasta el río de la Plata. – Estos límites experimentaron cambios y recortes en 1867 y en 1871 respectivamente.
Belgrano tenía límites como partido, pero carecía de un edificio que sirviera de sede a la Comisión Municipal y a las dependencias administrativas, por ello se decidió levantar un edificio propio frente a la plaza. Las obras se iniciaron en 1869, siendo Policarpo Mom presidente de la Comisión Municipal, sobre la base de un proyecto elaborado por el arquitecto Juan Antonio Buschiazzo. La casa municipal fue inaugurada el 8 de diciembre de 1872, se lo hizo por la noche con un baile, calificado de espléndido por la crónica periodística y hubo discursos alusivos a tan trascendente suceso.
EL CENSO DE 1869
Cuando se fundó Belgrano se creó una comisión que tenía la facultad de donar terrenos en el pueblo a quienes así lo solicitaran. La donación se efectuaba bajo la condición de que en el término de cinco meses, los beneficiados debían haber cercado el solar, o haber construido o dado principio a la construcción de un edificio. Si dentro de ese tiempo no se habían realizado los trabajos la donación quedaba anulada. Aunque no era obligatorio, los beneficiados a su vez, donaban alguna suma de dinero, el cual era destinado a solventar los gastos de obras públicas.
Las casas y cercos edificados dentro del pueblo, debían ser de material cocido, no así en la parte denominada “el bajo de Belgrano” en donde las construcciones podían ser hechas con cualquier tipo de material. El primer censo nacional llevado a cabo en 1869 determinó que en Belgrano estaban empadronados 2760 personas de las cuales 1502 eran argentinos y 1248 extranjeros en su mayoría europeos.
LAS PRIMERAS ESCUELAS
El decreto del 6 de diciembre de 1855 contenía dos referencias a la instrucción pública en el nuevo pueblo. La primera era la que disponía que en un costado de la plaza se reservasen solares para erigir escuelas destinadas a niñas y varones.
La primera escuela destinada a las niñas fue inaugurada en 3 de febrero de 1857, con un total de 15 alumnas y en marzo de ese mismo año la de varones con 28 alumnos. Así tuvo Belgrano sus dos primeras escuelas públicas, las que funcionaron en modestos locales, con un cerco de alambre por medianera, levantados en el terreno de las actuales Cuba y Echeverría frente a la plaza.
El constante aumento de la población belgranense determinó la sucesiva creación de nuevos establecimientos escolares de carácter fiscal, como también la instalación de institutos particulares. En la historia escolar de Belgrano está inscripto el nombre de un ciudadano que merece ser recordado por lo que hizo, en favor de la instrucción escolar.-Este fue Casto Munita quién se dedicó desde joven al comercio lo que le permitió alcanzar una situación económica holgada. Vecino de Belgrano donde habitaba en una quinta de su propiedad, destinó gran parte de sus bienes a sucesivas obras de fomento escolar. Donó células hipotecarias por la suma de 40.00 pesos fuertes al Consejo General de Educación de la provincia de Buenos Aires para que con sus rentas se construyera el edificio destinado a una escuela para niñas y varones. Esta donación permitió iniciar a comienzos de 1883 la construcción en el solar sito en Cuba y Echeverría, donde desde 1857 funcionaba en modestas instalaciones las dos primeras escuelas fiscales del partido.-
El constante aumento de la población determinó la sucesiva creación de nuevos establecimientos públicos como privados promovidos por entidades privadas o por comunidades religiosas que en la actualidad siguen funcionando. Al promediar el siglo XX abre sus puertas la universidad de Belgrano y en 1991 se crea la Universidad Di Tella.
LOS GRANDES PROGRESOS
Entre los muchos cambios e innovaciones que, a partir de 1850, se produjeron en la Provincia de Buenos Aires, el operado en materia de transportes y comunicaciones fue uno de los más significativos. Flores y Belgrano, los dos pueblos más cercanos a la Capital, se contaron entre los primeros beneficiarios. La llegada de la diligencia, el ferrocarril y el servicio de tranvías, hechos trascendentes producidos en un lapso relativamente breve, constituyeron una verdadera revolución en materia de transportes. Merecen también señalarse en materia de comunicaciones la instalación de líneas telefónicas, la provisión de agua potable y el alumbrado sin dejar de contar la instalación del hospital público. –
CARRETAS, GALERAS Y DILIGENCIAS
Carretas y galeras marcharon desde siempre por las tierras en que se asentó Belgrano hasta que fueron reemplazadas por breve lapso por las diligencias. Los servicios de diligencias se iniciaron casi coincidentemente con la fundación de Belgrano. Enseguida tuvieron gran aceptación por ser más cómodas y más rápidas, no habiendo mucha diferencia entre las importadas de Europa y las que comenzaron a fabricarse en el país. En los primeros días de 1857, el diario porteño “Los Debates”, de Mitre, publicó un aviso anunciando que a partir del 11 de enero, desde el Café de la Paz, sito en Paseo de Julio 16 (Leandro N. Alem) partirían diariamente dos diligencias muy decentes para Palermo y Belgrano teniendo por punto de llegada el almacén y casa de J. Gastelón, existente sobre la Calle Real (Cabildo).- Otro aviso daba cuenta de la existencia de dos servicios diarios, uno matutino y otro vespertino con partida desde la Recova, en la plaza de la Victoria que llegaba en pocas horas a San Fernando , pasando por Belgrano y San Isidro.-
Una de las diligencias más recordada por los belgranenses fue la conocida con el nombre de La Golondrina, de propiedad de Juan Callaba, un vasco francés que tenía su vivienda en Cabildo y Juramento. En noviembre de 1857, con motivo de la llegada del verano, la empresa de carruajes de plaza Los Iniciadores inauguró un servicio de diligencias que iba desde el centro de la Capital hasta Belgrano. Lo cumplían dos ómnibus de primera clase fabricados en París. – Los días laborables realizaban dos salidas por la mañana y otras tantas por la tarde. -Los días feriados tres.
EL FERROCARRIL
La provincia de Buenos Aires le ganó a la Confederación Argentina para instalar el primer servicio ferroviario.-Lo hizo la Sociedad de Ferrocarril del Oeste, empresa privada que inauguró sus servicios el 29 de agosto de 1857 con un viaje hasta Floresta pasando por Once, Almagro, Caballito y Flores.-Muchísimas personas se reunieron al costados de las vías para ver pasar al convoy, a cuyo frente iba “La Porteña”, locomotora traída de Gran Bretaña que adquiriría perfiles casi legendarios en la historia ferroviaria del país.
Belgrano debió esperar cinco años para gozar del nuevo medio de transporte. – En 1862 la empresa del Ferrocarril del Norte comenzó las obras destinadas a llevar el servicio hasta San Fernando. – Como se trabajó intensamente bastaron nueve meses para que quedara concluido el tramo de la primera sección.
La inauguración simbólica del servicio se realizó el 1 de diciembre de 1862, con las características de las grandes fiestas. A las 11 hs. llegaron hasta la estación central situada en Retiro, el Presidente Mitre, ministros, representantes de la iglesia, altos funcionarios, directivos de la empresa ferroviaria y una crecida cantidad de público.-Entre el estallido de cohetes y vítores de los invitados, el convoy partió a las 11.35hs, tres vagones preparados como elegantes salones estaban destinados a las autoridades y un cuarto a los músicos.
El convoy llego a la estación Belgrano (Juramento- Mendoza) a las 11.53hs., en medio de repiques de campanas y disparos de cohetes.- Luego de servirse un refresco en la sede de la Comisión Municipal, los invitados se trasladaron a un galpón armado para la ocasión junto a las vías.- Allí se ofreció un almuerzo, a cuyo término se sucedieron los brindis y los discursos de Mitre y sus ministros entre ellos Rufino de Elizalde quien tuvo un cálido recuerdo para Sarmiento, que se encontraba en EE.UU., por haber promovido la construcción del ferrocarril.
El funcionamiento efectivo de la línea se inició el 7 de diciembre con cuatro servicios de ida y otros tantos de vuelta los días hábiles, agregándose uno más los feriados. –
La segunda línea que pasaría por el partido por su lado oeste fue la que inicialmente llegaba hasta campana (1876). – Años después ya urbanizada la zona se instaló una estación entre las calles La Pampa, Juramento, Freire y Zapiola que se la denominó Belgrano R.
EL TRANVIA
Cuando el transporte urbano todavía se realizaba en Buenos Aires con diligencias, algunas calles vieron aparecer el tranvía a caballo como complemento del servicio ferroviario.- Pasarían algo más de diez años para que el “Tranway” llegase al pueblo de Belgrano.-Por fin en 1871 se decidió llamar a licitación para establecer ese servicio; de las presentaciones individuales hechas por cuatro firmas se consideró como más positiva la de Mariano Billinghurst y Cia.-El tranvía de Belgrano comenzó a circular el 3 de junio de 1872.
Por más de treinta años, Belgrano tuvo un servicio de transporte singular por ser de carácter estrictamente local: era un tranvía a caballo que hacía su recorrido de ida y de vuelta desde la esquina de Juramento y Vidal hasta la estación ferroviaria de Belgrano C. Con el correr de los años se agregó un segundo coche y se cambió el recorrido: el vehículo subía por Juramento hasta Vidal y regresaba por Echeverría hasta Virrey Vértiz. Este servicio se creó, en combinación con el ferrocarril para facilitar el traslado al centro de Buenos Aires a quienes realizaban allí su actividad diaria y habitaban en Belgrano. El tranguaicito funcionó hasta 1915.
El tranvía a caballo inició su retirada en la última década del siglo pasado al comenzar el proceso de electrificación de este medio de transporte. El vecindario de Belgrano vio llegar el primer tranvía eléctrico el 30 de agosto de 1900.-Seis décadas después Belgrano despediría al tranvía, el Centro de Comerciantes de Belgrano realizó en la calle Cabildo una simpática ceremonia cargada de nostalgias, en cuyo transcurso desfilaron tres tranvías, marchando el viejo coche tirado por caballos en medio de dos eléctricos.
EL TELEGRAFO Y EL TELEFONO
En cuanto al servicio telefónico comenzó para la ciudad de Buenos Aires el 4 de enero de 1881, el primer aparato telefónico fue instalado en la casa del Ministro de Relaciones Exteriores Bernardo de Irigoyen sita en la calle Florida entre Viamonte y Tucumán. El mismo día fue colocado el segundo aparato en la casa del Presidente de la Nación Julio A. Roca quien vivía en San Martín entre Tucumán y Lavalle.
Corridos tres meses de esas dos primeras instalaciones, el gobierno nacional autorizó a la Compañía Telefónica del Río de la Plata el tendido de líneas telefónicas una de las cuales llegaría a Belgrano. El primer aparato telefónico del partido fue instalado en el edificio de la Municipalidad y se le adjudicó el número 1.
EL ALUMBRADO A GAS
En 1871, la Legislatura de Buenos Aires aceptaba por ley la provisión de alumbrado público para Belgrano. Hechos todos los preparativos el 8 de marzo de 1884 se realizó la primera prueba con iluminación de gas de más de cien faroles en las calles Cabildo entre Echeverría y Juramento. Belgrano fue así el primer pueblo de la provincia de Buenos Aires iluminado con gas, siendo sólo precedido por la Capital. El gasómetro de Belgrano se instaló en la calle Blanco Encalada 1869, ocupando con sus dependencias tres manzanas y media. –
LAS CALLES DE BELGRANO
De las calles que aparecen señaladas en el proyecto de traza del pueblo de Belgrano (aprobadas por el ministro Alsina el 6de diciembre de1855) solo veinte tenían nombre y hoy subsisten solo dos. – Quién eligió las veinte denominaciones originales? no se sabe posiblemente hayan sido solo tres vecinos que tuvieron a su cargo el reparto de solares o lo realizaron en consulta con el ministro Alsina. -De lo que no queda duda que la elección tuvo sello porteñista como lo prueba 11 de septiembre. También llama la atención que sobre veinte nombres nueve correspondan a triunfos militares obtenidos en las luchas por la independencia. En 1893 se reforma la nomenclatura urbana:
• Se eliminan duplicaciones y nombres de personas vivas (25 de mayo por Cabildo)
• Se determina que los nombres de seis virreyes fueran dados a sendas calles de Belgrano
• Se incorporan a la nomenclatura belgranense los antiguos cuerpos militares de Blandengues, Arribeños, Artilleros, Montañeses.
CABILDO Y JURAMENTO
Al fundarse Belgrano en 1855 la actual avenida Cabildo, recibió el nombre de 25 de mayo y lentamente siguió abriéndose paso hacia el norte para llegar al final de siglo a la actual avenida General Paz. A medida que Belgrano crecía en la zona alta, Cabildo se fue transformando en su calle principal. Muchos comercios comienzan a instalarse y un buen día aparecieron los transportes colectivos (desde ómnibus tirado por caballos a los automotores diferenciales y subterráneo).
Cabildo con categoría de avenida fue escenario propicio para manifestaciones políticas, alegres desfiles de los estudiantes en el Día de la Primavera. Hoy es la arteria principal no solo de Belgrano sino también de Núñez y Saavedra. La calle Lavalle (Juramento) vio en los primeros años de su existencia surgir a su lado o a poca distancia la estación ferroviaria, la sede del gobierno municipal, la plaza, la iglesia, el mercado. Juramento adquirió condición de calle principal y su cruce con Cabildo comenzó a tener categoría de centro geográfico, que no lo era, pero sí de centro social, político y comercial.
UNA REVOLUCION EN MARCHA
Nicolás Avellaneda era presidente de la Nación desde el 12 de octubre de 1874.
El presidente tuvo que gobernar en medio de dificultades constantes. Una nueva complicación surgió en 1878 al asumir Carlos Tejedor el Poder Ejecutivo de la Provincia de Buenos Aires. Tejedor no se mostró nada conciliador desde el primer momento y en su mensaje a la Legislatura porteña calificó de “ilustre huésped” al gobierno nacional.
En 1879, es decir un año antes de finalizar su mandato el presidente Avellaneda dirigió un mensaje al congreso donde manifestó su pensamiento sobre la necesidad de que la ciudad de Buenos Aires debía ser declarada capital de la República Argentina.-El presidente confiaba en que la ya antigua Cuestión Capital quedaría resuelta antes de concluir su mandato. Más no sospechaba que la solución sería lograda tras la derrota de un movimiento revolucionario que iniciaría Buenos Aires por obra de su imprudente gobernador.
Al avanzar 1880 se hizo más que evidente la inminencia de la lucha armada. El gobierno bonaerense comenzó a realizar movilizaciones que provocaron diarias agitaciones y culminaron con el adiestramiento de ciudadanos en el manejo de las armas. En el mes de junio Avellaneda se traslado al vecino pueblo de Belgrano. Lo hizo acompañado por sus ministros y poco después llegó la mayoría de los diputados y senadores nacionales. El presidente salió de la ciudad el 2 de junio y se dirigió a los cuarteles instalados en la Chacarita de los Colegiales acompañado por su ministro de guerra y marina Carlos Pellegrini donde se encontraban las tropas nacionales. Al día siguiente dirigió una proclama al país denunciando la rebelión de Tejedor y marchó hacía Belgrano por el Camino de los Colegiales (actual calle Federico Lacroze) llamado así porque en años anteriores era recorrido por los alumnos del Colegio Nacional, donde se los llevaba en las vacaciones. Al llegar a Belgrano el presidente se hospedó en el Hotel Watson, el de más categoría, ubicado frente a la plaza y al lado del templo parroquial; luego pasó a ser huésped de la familia Astigueta, cuya casa se alzaba en la intersección de las actuales calles Echeverría y Vuelta de Obligado. Cabe señalar que entre los visitantes que llegaron a Belgrano en esos tiempos se encontraron dos ex-presidentes Mitre y Sarmiento, como así también representantes diplomáticos de países americanos y europeos, altos jefes militares, prelados y dirigentes de empresas extranjeras.
El 4 de junio, día de su llegada, Avellaneda se reunió con sus ministros en la Casa Municipal y allí declaró por decreto a Belgrano residencia de las autoridades nacionales y el Congreso aprobó la decisión presidencial. La lucha armada entre las fuerzas nacionales y porteñas concluyó a fines de junio, Mitre se trasladó a Belgrano donde se entrevistó con los ministros de Avellaneda en la Casa Municipal, a fin de dar término decorosamente a la llamada Revolución del 80.-Tejedor renunció y fue reemplazado por el vice-gobernador José María Moreno.
FEDERALIZACIÓN DE BUENOS AIRES
Aunque había concluido la lucha armada, el Gobierno Nacional permaneció en Belgrano hasta principios de octubre. El 24 de agosto el presidente Avellaneda elevó un proyecto de ley por el que se declaraba la Capital de la República. El 21 de septiembre de 1880 el Congreso aprobó la ley ratificada posteriormente por la legislatura porteña. El año 1880 marcar la iniciación de un periodo definitivo: la República va a contar por fin con su capital estable y definitiva.
El 6 de julio de 1882, el presidente de la Comisión Municipal y juez de Paz de Belgrano, Rafael Hernández solicitó al gobierno de la provincia de Buenos Aires, que el pueblo fuese elevado a la categoría de ciudad.
Para fundamentar esta petición Hernández acompañó al pedido un listado con los progresos que ostentaba el pueblo. Quienes habían decidido en 1880, la federalización de Buenos Aires, sabían que el territorio municipal era pequeño y que muy pronto habría que ampliarlo. Así se llegó a 1887, año en que la Provincia acordó ceder los partidos de Flores y Belgrano a la Nación y esta los aceptó. Con esto Belgrano quedó incorporado a la ciudad de Buenos Aires como barrio porteño.
Prof. Silvia Vardé
Pte. Junta de Estudios Históricos de Belgrano
Bibliografía
-Allende, Andrés “Los orígenes del pueblo de Belgrano (1855-1862)”, La Plata, 1958.-
-Calderón, Elisa “Incorporación de Belgrano a la Ciudad de Buenos Aires”, JEHB, Bs.As.1988.-
-Córdoba, Alberto “Cronología del barrio de Belgrano 1855-1910”, Buenos Aires, 1981.-
-Cutolo, Vicente “Buenos Aires: historia de las calles y sus nombres”, Ed. Elche, Bs.As. 1988.-
-El Heraldo, periódico publicado en el barrio de Belgrano (1913-1940). –
-González Podestá, Aquilino, “Los Tranvías de Buenos Aires”, Buenos Aires, 1986.-
-Iñigo Carrera, Hector,” Belgrano, pueblo, ciudad, capital y barrio”, Buenos Aires,1962.-
-Mayochi, Enrique, “Otros días de Belgrano”, JEHB, Buenos Aires, 1988.-
-Mayochi, Enrique,” Belgrano 1855-del pueblo al barrio-1998”, JEHB, Buenos Aires, 1998.-
Breve historia de la junta
Todos los barrios de la CABA tienen su historia la cual le concede una identidad propia.
Una de las características del Barrio de Belgrano es que no nació como barrio, sino que nació como pueblo un 23 de noviembre de 1855 fue capital de la república y sede de las autoridades nacionales por cinco meses en 1880
Para pasar a convertirse 3 años más tarde en una ciudad de la provincia de Buenos Aires y finalmente en 1887 junto con San José de Flores a convertirse en un barrio porteño.
Pero yo no les voy a hablar de la historia de este barrio que es muy rica por cierto sino de una institución que permite que la historia del barrio no se pierda al contrario siga vigente a través del tiempo y es la JEHB.
Por iniciativa del destacado vecino Alberto Octavio Córdoba quien siempre demostró un especial interés por el barrio, sobre todo en lo referido a su historia, reunió a un grupo de amigos en el consultorio del Dr. Marcelo Canevari, otro sobresaliente vecino y profesional, con el fin de cambiar ideas sobre la creación de una asociación o entidad que se ocupara de rescatar el pasado del barrio.
No fue la primera iniciativa de este tipo, ya que anteriormente, había existido otra que se conocía como Centro de Estudios Históricos del Pueblo de Belgrano, dirigida por el profesor Héctor Iñigo Carrera, autor de uno de los primeros libros sobre la historia del barrio.
De la reunión mencionada, se decidió crear una entidad que se denominaría JUNTA DE ESTUDIOS HISTORICOS DE BELGRANO, cuya acta de fundación es de fecha 23 de junio de 1968, por lo que ya han transcurrido 50 años de su creación.
Entre los miembros fundadores podemos mencionar a Alberto Octavio Córdoba, que fuera designado presidente, el Dr. Marcelo Canevari, el Sr. Juan Carlos Zuretti, el Prof. Enrique Mario Mayochi, el Prof. Roberto Burton Meìs.
El Estatuto Constitutivo comprendía varios capítulos, entre las más importantes mencionaremos:
-Realizar, promover y coordinar investigaciones históricas y en particular a las relativas al antiguo partido de Belgrano.
-Dar a conocer el resultado de las investigaciones y contribuir a su difusión.
-Organizar archivos, cartografía y hemeroteca.
-Mantener vínculos con entidades similares de la ciudad de Bs. As. y del país, como también con personas que participen de los propósitos enunciados.
Otro de los capítulos disponía que los miembros de número serían 30, también podría haber honorarios, correspondientes y adherentes.
Entre los primeros actos públicos efectuados a poco de fundada esta junta mencionaré el recordatorio al poeta José Hernández y el aviador Jorge Newbery ambos vecinos de notoriedad.
La junta hoy
Desde su fundación la Junta desarrollo una intensa actividad académica.
Actualmente tiene su sede en el Museo Histórico Sarmiento. Sus ciclos de conferencias y publicaciones atraen el interés del vecindario, que participa en gran número de las reuniones públicas.
Miembros de la Junta concurren a instituto escolares y centros sociales a disertar sobre la historia del barrio.
En la actualidad la Junta posee una gran colección de periódicos y publicaciones de distintas épocas, planos mapas y un importante archivo fotográfico del Belgrano de todos los tiempos.
Ahora quiero recordar a los que formaron parte de esta junta y que hoy permanecen en nuestro agradecido recuerdo:
Héctor Iñigo Carrera que escribió el primer libro sobre la historia del barrio “Belgrano pueblo, ciudad, capital y barrio” además de innumerables artículos y publicaciones.
Alberto Octavio Córdoba que escribió Historia del Barrio de Belgrano y Cronología del barrio de Belgrano 1855-1910 (este es un trabajo impecable que relata día por día los acontecimientos que tuvieron lugar en el barrio).
Prof. Elisa Cassella de Calderón historiadora, investigadora que supo volcar su excelente trabajo en una publicación que título “Buenos Aires nos cuenta” que tiene varios números dedicados al barrio.
Prof. Alfredo Nocetti docente, investigador conferencista con numerosas publicaciones no solo sobre el barrio sino también relacionadas con la historia argentina.
Sr Jorge Busse: secretario de la junta durante mucho tiempo que fue quien hizo el relevamiento de toda la documentación que había en la junta y organizó todo el archivo
(un trabajo impecable).
Enrique Mario Mayochi: vecino distinguido del barrio, conocía cuanto se puede saber de su pasado, de sus hombres memorables, de sus edificios emblemáticos y de su historia.
Fue docente, investigador, periodista. Integro numerosas entidades culturales.
Fue autor de una decena de libros y cientos de artículos periodísticos sobre el pasado porteño y la historia nacional.